27 abril 2014

Delincuencia navega por internet para extender miles de tentáculos

Basta darse “una vueltita” por el ciberespacio de internet para darse cuenta que cada vez son más los delincuentes que se aprovechan de la rapidez, la comodidad y el anonimato que ofrecen las tecnologías modernas para detectar y espiar a sus próximas víctimas, para vender los objetos que roban en atracos y para contactarse con otros ladrones o criminales, dentro y fuera del país.

En el caso de las pandillas, el internet se ha convertido en una herramienta importante para captar nuevos integrantes y expandirse, citarse a reuniones, anunciar fiestas, publicar fotos de sus “hazañas” y hasta para amenazar o desafiar a sus rivales con códigos encubiertos.

Empero, no solo los delincuentes que se especializan en apropiarse de lo ajeno usan el internet para concebir y encaminar sus delitos. Otro tipo de delincuentes también acecha desde el ciberespacio. Los pedófilos que, para atraer a sus víctimas abren cuentas falsas en las redes sociales, utilizando como carnada las fotos de jóvenes o anuncios de trabajos de modelaje, ya han logrado destruir las vidas de decenas de adolescentes y jóvenes en Cochabamba y en Bolivia.

El delito también navega en internet cuando personas inescrupulosas extorsionan y comercializan pornografía e imágenes íntimas de personas comunes y corrientes, o de personajes conocidos en la televisión o en el modelaje, para lucrar a costa del morbo y el dedo acusador de grupos de internautas que con sus juicios persiguen, ofenden, sentencian y “linchan”, social y públicamente, a las víctimas.

El caso de la presentadora de televisión Paola Belmonte puso en evidencia el oscuro mundo de la extorsión digital y de la dictadura del “linchamiento social” a través de las redes.

Belmonte no cedió a la extorsión de un hombre que grabó imágenes íntimas de su relación con ella, pero el precio de negarse a consensuar con el delito fue alto: una viral difusión de las imágenes que la obligó a alejarse de la pantalla chica y encerrarse a luchar por la sobrevivencia de su familia. La víctima tuvo que apelar a su rol de madre para defender sus derechos de ser humano y lograr que la justicia ordene el retiro del material difundido, algo casi imposible tomando en cuenta que existen miles de copias descargadas a teléfonos celulares, tablets y laptops personales.

LAS CHUPER PARTY

Navegando en el mundo virtual también es posible vislumbrar la doble vida en la que zigzaguean distintos grupos de adolescentes y jóvenes en Cochabamba. Muchos de ellos les mienten a sus padres diciendo que van a una pijamada o a una inocente fiesta en la casa de un amigo.

Hay padres que los dejan en la casa “de familia” pensando que no hay lugar más seguro que una vivienda particular, pero no imaginan lo que ocurre detrás de los muros de ese domicilio. Fiestas donde abundan la marihuana, fármacos psicotrópicos y bebidas que están prohibidas en otros países por el terrible daño que causan a la salud.

El submundo de los adolescentes es atractivo para algunos empresarios, que siendo dueños de locales o discotecas no quieren renunciar a los ingresos económicos que les generan los menores de edad, y por ello organizan fiestas privadas en “casas de familia”, con el fin de burlar los controles de padres, policías, de la Defensoría de la Niñez y la Intendencia. Alquilan casas y usan a menores de edad, a través de internet, para vender las entradas a las Chuper Party, donde no existen restricciones y se fomenta la corrupción de adolescentes.

Más de 2 millones de clientes en la Red

Bolivia vive un boom. En 2008 habían 233.978 conexiones de internet en el país. Hasta el 29 de junio de 2013, las conexiones de internet alcanzaron a 1.966.732 y la Autoridad de Fiscalización y Regulación de Telecomunicaciones (ATT) pronosticó que hasta fines del año 2013 las conexiones serían 2.5 millones.
Facebook tiene 2.2 millones de usuarios

Hasta junio de 2013, en Bolivia existían 2.2 millones de usuarios registrados en Facebook. En Santa Cruz habían 700 mil, en Cochabamba 300 mil, en La Paz 128 mil, en Potosí 42 mil, Oruro 38 mil, Tarija 34 mil, Trinidad 7.600 y Pando 280.

En la Llajta, hasta esa fecha, habían 312.790 conexiones a internet.

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