Apple es sancionada por publicidad engañosa y violación de patentes

La americana Apple ha recibido una condena millonaria en Australia por hacer publicidad engañosa de su nueva tableta, el iPad. Apple tendrá que pagar 2,25 millones de dólares australianos (1,8 millones de euros) al estado australiano porque la publicidad que hizo de este producto no se ajusta a la realidad.

Y es que la compañía de la manzana anunció que esta tableta sería compatible con redes 4G (LTE). Esta tecnología permite una conexión mucho más rápida que el estándar 3G que se utiliza en todo el mundo. Con ella, la conexión a Internet puede alcanzar los 100 megas de descarga por segundo si el aparato se está moviendo, y hasta 1 GB si permanece quieto.

El problema es que las redes australianas no funcionan de la misma manera que las de Estados Unidos, con lo que los nuevos iPad no pueden acceder a esta velocidad. Según el juez encargado del caso, Mordecai Bromberg, la compañía conocía de antemano este problema, y aun así insistió en anunciar que funcionaría.

Apple ya había reaccionado antes de la condena, ofreciendo a los compradores la posibilidad de devolver el aparato a la tienda y recuperar su dinero. Además, todos lo iPad que se venden en este país llevan una etiqueta en su envoltorio, advirtiendo del problema.

Estas precauciones no han sido suficientes para el tribunal, que ha estimado que la conducta de Apple ha sido “grave e inaceptable”, por lo que ha impuesto la multa millonaria. No es el primer problema legal al que se enfrentan en la compañía de California. Numerosos países han condenado a Apple por diferentes asuntos, como la violación de patentes o de los derechos de los consumidores en materia de garantía de producto.

Especialmente conocidos han sido los casos de enfrentamientos con la marca coreana Samsung, en lo que se acusan mutuamente de violar sus patentes. El último capítulo de esta historia también ha acabado con condena para Apple, en este caso en un tribunal holandés. Aun no se sabe la cuantía de la multa, pero los de Tim Cook tendrán que pagar a Samsung por violar una de sus patentes.